Valldemossa.


Convocatoria BaixFort para una ruta sin descripción previa por parte del sherpa, pero que auguraba sufrimiento a los musculares por el punto de salida: el Estret de Valldemossa. Unos pensaban que el estrecho era un Catalán que vivía en Valldemossa y otros fueron a buscar la estación de autobuses, pero finalmente nos convregamos en el sitio correcto Jaume, Luis, Salinas, Bruno, Fabián, Bernat, Rody, Serafín y Maxi.

Foto de grupo y empezamos a rodar por el camí de Son Brondo y Son Sauvat en dirección Valldemossa y más allá por la urbanización s'Arxiduc. Con eso, las dudas sobre parte del itinerario del día estaban ya despejadas: íbamos al matadero. Dirección Es Cairats. Quizás la subida más dura que pueda encontrarse en Mallorca, aunque en esas valoraciones siempre son sujetivas. Y por otra parte, no sirven de nada: no hay cosa peor sobre una bicicleta de montaña que sugestionarte mal.
Subida rápida y fácil para los eléctricos, que para eso se han gastado una pasta; larga y jodida para los musculares, pero con buenas sensaciones sin embargo. Y es que el MTB también es sufrimiento al fin y al cabo: sobretodo el sufrimiento de aguantar las burlas de los putos enchufados ⬇️!
Desde el refugio y en la parte técnica antes de llegar al tramo superior del Camí de s'Arxiduc el ritmo se ha nivelado algo más; en la parte de arriba cada uno ya ha hecho lo que mejor ha sabido hasta prácticamente llegar a los pinos del Plà dets (de ses?) Aritges, donde nos reagrupamos, el Pibe aprovecha para poner la Ghost a punto y la gente en general para meterse unos con otros entre exabruptos y flatulencias.
Sube y baja por el Camí de Ses Fontanelles, pasado el cruce del Caragolí, hasta llegar a un desvío a mano izquierda que nos lleva, por un camino de cabras fitado y tras un leve contratiempo del Montañés de Córdoba, hasta la trazada de la bajada. Bajada pedregosa, larga y divertida que sorteando guiris andantes nos ha llevado hasta la caseta del guarda de Son Moragues, quien creo que quería agregar al Maxi a su Facebook.

Llegados a Valldemossa callejeamos por el pueblo en búsqueda del camino hacia la depuradora, donde hemos perdido la pista de Salinas y Rody por unos momentos, y de aquí ya sobre nuestras propias marcas volviendo al Estret por Son Sauvat y Son Brondo entre rejillas y zarzas.

Final de ruta en Ca na Brutes de s'Esglaieta. No se sabe si se llama así por la palabra catalana susto (esglai) o por su iglesia pequeña, pero da igual y el propietario del bar tampoco nos iba a dar la respuesta porque por no dar no da ni los buenos días.
Buen día, buena ruta y buena gente. Molts d'anys Serafín y salud para todos!


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Se come más que se rueda.

8.1

Huevo frito (con bacon y patatas).