Andratx

 Quedada a las 8 de la mañana en un punto incierto cercano al campo de fútbol de Andratx; no por el fútbol en sí mismo, sino por la cercanía con el bar donde sobre las 12 debíamos brindar con las cervezas de rigor por la buena ruta que todos desconocíamos en mayor o menor medida.

Nos congregamos ahí el Profe, Salinas, David, Luis, Alex, Pinturas, Juanse, Llorenç y Fabi aka El boludo solitario. Charleta inicial y sin foto de rigor (No Esper Ningú és el nuevo lema) partimos sin direcciones prohibidas por una vez hacia la Coma Freda, en busca de un desvío inconcreto que nos subiera hasta el Puig de Sa Font. Tras algún desajuste hemos tomado la traza correcta por el Camí de So Na Vidala primero y Des Badaluc después.

En lo alto del Puig y entre las ruinas de una torre de vigilancia y a pesar de los teléfonos nublados sí nos hemos sacado unas cuantas fotos de familia para emprender el descenso hacia s'Arracó. Un descenso placentero, divertido y sin complicaciones, con un suelo libre de piedras y con un nivel de humedad para agarrar a la perfección.

Una vez en s'Arracó toca ir pensando en rodar por el Camí de Son Castell hasta empalmar con una bajada que debía dejarnos en el cementerio de s'Arracó pero que no hemos terminado de atinar y nos ha dejado más cerca del pueblo, en lo que ha sido el único error de la ruta.

Con el Pas Vermell ya en mente empezamos a rodar con algunos parones porque al Pinturas no se le levanta (la tija) o no se le baja (la tija). Ritmos dispares hasta llegar al desvío por donde hemos hecho un tramo inédito para muchos llamado en Strava "Mirador Dragonera Long" (¿por qué no "largo" y yasta?). Una variante mucho más bonita a la pista clásica con unas magníficas vistas. Llegados a la subida al Pas Vermell y más allá pues cada uno hace lo que puede y sabe para llegar arriba, o sea poner pie con más o menos dignidad.

Bajada del Pas Vermell entre saludos de guiris y esquivando charcos hasta enlazar con el DH del Port de Andratx.  Caída de Alex, afortunadamente sin consecuencias graves y llegados cerca del Port David nos deja para atender asuntos más importantes, si es que tal cosa puede existir...

Los demás seguimos para hacer la 20 céntimos, que no es otra cosa que una subida por rampones de asfalto de Cala Llamp hasta el carrer de s'Anfós (que no del Cranc...) y de allí bajada en dos tramos hasta empalmar la carretera del Port que debe devolvernos a Andratx para las birras.

Por lo avanzado de la hora el cronista no pudo beberse ni una cerveza, y tampoco hay constancia fotográfica en el chat del grupo, así que hasta aquí la crónica de esta buena ruta por territorio casi virgen para el grupo. Buen día de MTB y buena gente, ¿qué más se puede pedir?